En esta ocasión se trata de una visita en la que se conocerán los lugares más emblemáticos de las tres religiones que habitaron juntas durante un periodo de casi ocho siglos. Es cierto que en cualquier rincón de la ciudad se puede respirar aire de las tres culturas, especialmente en sus monumentos, pero también en la estructura de la ciudad, de sus calles y plazuelas.
Por parte del mundo musulmán visitamos la Mezquita del Cristo de la Luz, en la zona que se encuentra entre las murallas y la Plaza de Zocodover. Se trata de la construcción completa más antigua de la ciudad, del siglo X, a la que posteriormente se le añadió el ábside para ser utiilizada como templo cristiano después de la Reconquista.
El mejor ejemplo de los edificios cristianos en Toledo es su Catedral, que se incluye también en este recorrido con la visita a sus museos. Se trata de la Catedral Primada de España, que ofrece una riqueza espectacular en todos los sentidos, tanto para el fiel como para el visitante.
Y en el barrio judío seleccionamos en esta ocasión la Sinagoga de Santa María la Blanca. Esta sinagoga única es en sí un ejemplo de las tres culturas, puesto que se puede encontrar en este enclave trazas mudéjares y partes cristianas en lo que fue en sus orígenes un templo judío.